Adaptación Intercultural

Algunas personas consideran que el proceso es un "impacto cultural". Otras, quienes lo ven de forma más positiva, lo llaman "adaptación intercultural".

Independientemente de cómo se perciba, el proceso de adaptación implica una serie de fases por las que cada persona pasa a su propio paso. Es normal que la mayoría de nosotros experimentemos cuatro fases de adaptación cuando abandonamos un lugar familiar y nos trasladamos a un nuevo lugar, donde todo nos resulta desconocido.

Anticipar estas fases reducirá su estrés, aumentará su autoestima y le permitirá ser más productivo. Lo que sigue es una descripción de las cuatro etapas de un ciclo típico de adaptación. También se presentan algunos comentarios acerca de la repetición del ciclo.

Fase I: Entusiasmo

Al principio, entrar en contacto con una nueva cultura normalmente le parecerá emocionante, interesante y divertido. Justo antes de llegar a un nuevo país, y poco después de haber llegado, las personas experimentan curiosidad, fascinación y un gran deseo de probar cosas nuevas y de conocer a gente nueva. Es posible que sus expectativas sean altas y, a veces, no realistas. Durante este tiempo, también ocurre el feliz reconocimiento de que ésta es una oportunidad personal y profesional excepcional. Esta fase a menudo corresponde con el primer mes o más del sitio donde nos acogen, cuando casi todo el mundo es amable y servicial, amistoso y comprensivo.

Fase II: Pérdida y ansiedad

Después de que la novedad y la emoción se desvanecen, muchas personas empiezan a extrañar a su familia y amigos, así como comidas, actividades y rutinas familiares. Muchas veces, los estudios o el trabajo se vuelven más difíciles. Es posible que los que hayan aprendido el idioma del país anfitrón recientemente descubran que su capacidad de comunicación no es tan avanzada como para permitirles una interacción en un nivel personal y profesional más profundo. Esto puede crear confusión acerca de cómo relacionarse con otras personas y producir una sensación de aislamiento.

Durante esta fase, la nueva cultura a menudo resulta menos fascinante y frecuentemente surgen quejas acerca de diversos problemas (algunos reales y otros imaginarios) en el ambiente anfitrón. Algunas personas comenzarán a sentirse desanimadas, ansiosas, nostálgicas, solitarias, inmotivadas o negativas respecto a sus programas. Estas preocupaciones pueden manifestarse de distintas formas: cambios en el apetito, patrones de sueño modificados, una mayor necesidad de estar solo y una pérdida de la habilidad de concentrarse. Cada persona reacciona de una manera diferente; sin embargo, todos comienzan a actuar en formas que son distintas a sus patrones normales de conducta. 

Adaptarse a esta fase de confusión es un reto. Los expertos en el ámbito de adaptación intercultural recomiendan a las personas que experimentan esta sensación de desorientación que intenten evitar tomar decisiones que puedan causar estrés durante este período. Para combatir los sentimientos de desánimo y aislamiento, recomiendan que hable con amigos y conocidos acerca de estos sentimientos, escriba sus impresiones y experiencias tanto en cartas, e-mails como en un diario y participe en actividades nuevas. Las organizaciones de migrantes, la unión de estudiantes o el centro social o el centro estudiantil de su escuela o universidad es un lugar excelente para averiguar más acerca de asociaciones y actividades diseñadas para una gran variedad de intereses y niveles de experiencia.

Muchos centros sociales y universidades tienen recursos de información y de orientación que ofrecen asistencia y consejos a personas que se sienten temporalmente nostálgicos, preocupados o que se enfrentan a decisiones importantes. Entre estos recursos se encuentran las asociaciones de migrantes o estudiantes internacionales, los asesores para estudiantes internacionales y los centros de consejería.

Fase III: Recuperación

En poco tiempo, la mayoría de las personas comenzarán a recuperar su interés por el nuevo ambiente, gracias a su mayor autoestima, una mayor familiaridad con los alrededores y un mejor entendimiento de las diferencias culturales que inicialmente pueden haber sido la causa de frustración y confusión. El inmigrante comienza a sentirse, por fin, como la misma persona que viajó al país nuevo en el principio, y recupera tanto su energía como la habilidad de esforzarse por conseguir sus importantes metas académicas y su satisfacción personal.

Fase IV: Adaptación y aceptación

En la cuarta fase del proceso de adaptación intercultural, la mayoría de las personas comienzan a concentrarse más en las ganancias que han podido obtener gracias a sus nuevas experiencias, que en la pérdida de lo que les resulta familiar. Los inmigrantes se dan cuenta de que están ampliando su entendimiento respecto a sí mismos y respecto a su propia cultura, y su satisfacción y autoestima continúan creciendo.

El ciclo se repite

El ciclo de adaptación no está limitado a la primera experiencia de vivir en un ambiente extraño. Puede repetirse en varios grados cada vez que un inmigrante comience algo nuevo, incluso dentro de la misma área geográfica; por ejemplo, cuando empiece un nuevo trabajo, un nuevo semestre de estudio o cuando celebre un aniversario importante.
Interacciones sociales

Hay muchas interacciones que les resultan difíciles a los inmigrantes cuando acaban de llegar a un nuevo país. Uno de estos aspectos es el nivel de informalidad que se usa en las comunicaciones. Por ejemplo, a menudo las personas se saludan diciendo: "Hola, ¿cómo estás?". En algunos países, esto sólo significa "Hola". Se espera una respuesta breve como: "Bien, gracias, ¿y tú?"

Tenga en cuenta que es posible que las señales no verbales que otras personas envían no signifiquen lo que usted cree. Los gestos y hábitos se vuelven automáticos y pueden variar de una cultura a otra. Por ejemplo, en algunos países es aceptable llegar tarde a una reunión o cita. En Canadá, se considera de mala educación no llegar a tiempo. Si le parece que las palabras y las acciones de alguna persona no concuerdan, debe pedirle al individuo que se explique.

El shock cultural

Resulta del encuentro personal intenso con personas de una cultura diferente. También se puede producir cuando la situación requiere del sujeto respuestas diferentes a las acostumbradas, por ejemplo un divorcio, viudedad, pérdida de empleo, jubilación, aparición de una discapacidad, etc. Se hace necesario el re-aprendizaje de respuestas.

El shock cultural puede producir:

Estrés y desorientación relacionada con valores, normas y expectativas, que ocurre cuando un sujeto sufre un cambio en su entorno y carece de recursos suficientes para responder adecuadamente a la nueva situación.
Ansiedad resultante de un proceso de ajuste de su entorno: pérdida del sentido del bien y del mal, se acompaña de manifestaciones emotivas, de conducta o fisiológicas.
Frustración de no conseguir los objetivos deseados: a través de la frustración puede alcanzarse un mayor grado de desarrollo.

Etapas del shock cultural

1º.Contacto inicial durante el cual se seleccionan y examinan las diferencias sin haber abandonado todavía su identidad previa.
2º.Desintegración de las claves familiares, que conduce a un sentirse diferente, a cometer fallos de adaptación y a una merma de autoestima.
3º.Reintegración de nuevas claves, que conduce a un estado de rebelión, de rechazo de las diferencias y de afianzamiento de la propia autoestima con inculpación a otros de los fallos.
4º.Formación de una nueva identidad, en la cual se reconocen las semejanzas y las diferencias, se asienta la idea de que se es capaz de sobrevivir ante nuevas situaciones y se produce una relajación en las relaciones.
5º.Biculturalismo al poder responder tanto a situaciones del nuevo entorno como del anterior, valora y da sentido a las diferencias, recupera la confianza y puede emprender procesos creativos.

De esta forma y si se está en disposición de superar estas fases el shock cultural no tiene porque ser negativo sino todo lo contrario, puede ayudar al desarrollo de destrezas que enriquezcan notablemente al individuo.